Acceso directo
Descripción
Dolmen de Chan de Armada
En la tranquila localidad de Moaña, en la provincia de Pontevedra, se encuentra uno de los monumentos más emblemáticos del patrimonio cultural gallego: el Dolmen de Chan de Armada. Este megalito funerario, que data de aproximadamente 3000 a.C., forma parte de los Yacimientos Arqueológicos de Pontevedra, una zona rica en historia y cultura prehistórica.
Ubicación y acceso
El dolmen se localiza en las coordenadas 42º 19' 09.9" N / 8º 41' 52.9" W, muy cerca de otro destacado monumento funerario de la región, el Dolmen de Chan de Arquiña. Su fácil acceso lo convierte en una parada obligatoria para los amantes de la historia y la arqueología, que podrán disfrutar de una visita única.
El monumento funerario
Este dolmen es una estructura megalítica formada por una cámara funeraria y un corredor de entrada. La cámara, que sigue el modelo típico de los dólmenes de la región, está construida con grandes losas graníticas, sostenidas por cuñas de piedra que se mantienen en su lugar gracias al ingenio de sus constructores prehistóricos. Visitarlo permite comprobar de primera mano cómo se disponían estas piedras y experimentar la sensación de estar dentro de una construcción que tiene más de 5.000 años de historia.
Descubrimientos arqueológicos
Durante las excavaciones realizadas en el sitio, se encontraron diversos objetos de gran valor arqueológico, como puntas de flecha, cuchillos de sílex, machados, un percutor y fragmentos de cerámica. También se hallaron cuatro bolas cuyo significado aún se desconoce. Estos hallazgos aportan una visión única sobre las prácticas funerarias y la vida cotidiana de las comunidades prehistóricas que habitaron la zona.
Un viaje al pasado
Visitar el Dolmen de Chan de Armada es adentrarse en la Galicia ancestral, una oportunidad para explorar el legado de las primeras civilizaciones de la región. Este monumento no solo es un testimonio de la habilidad y conocimiento de sus creadores, sino también una invitación a reflexionar sobre las tradiciones funerarias y la relación del ser humano con su entorno en tiempos remotos.
La visita al dolmen se convierte, por tanto, en una experiencia enriquecedora tanto para los turistas como para los estudiosos de la arqueología. Un sitio que, además de su valor histórico, ofrece una inmersión en la historia viva de Galicia.