Acceso directo
Descripción
Fervenza de Pacios de Veiga
La fervenza de Pacios de Veiga, situada en el municipio de A Pobra do Brollón, en la provincia de Lugo, es un rincón natural que sigue sorprendiendo a quienes se atreven a descubrirla. Ubicada en el río Cabe, esta cascada, aunque no es una de las más conocidas de la región, guarda una belleza oculta en medio de la espesura del bosque gallego.
Cómo llegar a la cascada
Para acceder a la fervenza de Pacios de Veiga, se debe tomar la carretera que conecta A Pobra do Brollón con A Cruz do Incio. Tras pasar por el pequeño núcleo de Pacios de Veiga y antes de llegar a Biduedo, se escucha el rugir del agua, un sonido que marca la cercanía de la cascada. La caída de agua, de unos 8 metros de altura, se encuentra a la derecha de la carretera, entre una vegetación densa y de difícil acceso.
Dificultad de acceso
El acceso a la cascada es complicado. No hay un sendero claramente marcado, por lo que es necesario bajar por una pendiente pronunciada y algo resbaladiza, que se ve dificultada por las terrazas formadas en la parte baja del terreno. La falta de señalización y la escasa infraestructura hacen que este sea un destino ideal para los amantes del turismo de aventura y de la naturaleza en su forma más salvaje.
Una joya dentro del Camino de Invierno
La fervenza de Pacios de Veiga se encuentra en el camino de invierno, una de las rutas menos transitadas del famoso Camino de Santiago. Esta ruta, que atraviesa la provincia de Lugo, lleva a los peregrinos por paisajes espectaculares, entre ellos la cascada de Pacios de Veiga, ofreciendo una experiencia única para quienes se desvían del camino principal para explorar la belleza natural de la zona.
Este paraje es un ejemplo perfecto de la riqueza natural que Galicia ofrece a quienes se aventuran a conocerla más allá de los destinos turísticos más populares. Sin duda, la fervenza de Pacios de Veiga se erige como un tesoro escondido que invita a la reflexión sobre la fragilidad y la belleza del entorno natural gallego.